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Un Viaje a Través de las Realidades Laborales »

El desempleo es un indicador económico crítico que refleja la salud del mercado laboral de un país. Altas tasas de desempleo pueden ser sintomáticas de crisis económicas, inestabilidad política, o transiciones industriales.

Hoy, exploramos algunos de los países con las tasas de desempleo más altas del mundo, entendiendo las complejas causas y las impactantes consecuencias que afectan la vida de sus ciudadanos.

1. Sudáfrica

Sudáfrica ha sido durante mucho tiempo uno de los países con mayores tasas de desempleo. En el 2023, el desempleo se situaba cerca del 34%, una cifra alarmante que refleja problemas estructurales profundos. La desigualdad económica, la falta de acceso a una educación de calidad y la corrupción endémica contribuyen significativamente a esta crisis.

La pandemia de COVID-19 exacerbó aún más la situación, dejando a muchas personas sin trabajo y aumentando la pobreza. Los esfuerzos del gobierno para revitalizar la economía y crear empleo se han visto obstaculizados por estos problemas persistentes, aunque continúan las iniciativas para promover el emprendimiento y las pequeñas empresas.

2. Grecia

Grecia, tras la crisis financiera del 2008, experimentó una de las tasas de desempleo más altas de Europa. Aunque ha habido mejoras, el desempleo sigue siendo un problema significativo. En el 2023, la tasa de desempleo estaba alrededor del 13%, con una mayor incidencia en la población joven.

La austeridad impuesta por los rescates financieros y las reformas estructurales han sido dolorosas, llevando a muchos griegos a emigrar en busca de mejores oportunidades. Sin embargo, la economía griega ha mostrado signos de recuperación, y el turismo sigue siendo una industria clave que proporciona empleo estacional a muchos ciudadanos.

3. Nigeria

Nigeria, la economía más grande de África, también enfrenta un alto desempleo, con tasas superiores al 33% en el 2023. La dependencia del petróleo ha hecho que la economía sea vulnerable a las fluctuaciones de los precios internacionales.

Además, la insurgencia de Boko Haram en el noreste del país ha causado desplazamientos masivos y destrucción de infraestructura, afectando negativamente al empleo. Las reformas económicas y los esfuerzos para diversificar la economía están en marcha, pero los desafíos son formidables.

El sector agrícola y las industrias creativas están emergiendo como áreas potenciales para la generación de empleo.

4. España

España ha luchado con altas tasas de desempleo durante la última década, especialmente entre los jóvenes. En el 2023, el desempleo general se situaba alrededor del 13%, con el desempleo juvenil alcanzando cifras preocupantes de más del 30%.

La crisis financiera global y la burbuja inmobiliaria del 2008 dejaron cicatrices profundas en el mercado laboral español. A pesar de los esfuerzos del gobierno por fomentar la contratación y mejorar las condiciones laborales, muchos jóvenes españoles siguen enfrentando contratos temporales y salarios bajos.

La formación profesional y las políticas de apoyo a las startups se consideran esenciales para abordar este problema a largo plazo.

5. Bosnia y Herzegovina

Bosnia y Herzegovina es otro país con una alta tasa de desempleo, rondando el 34% en el 2023. La transición desde la guerra de los años 90 ha sido difícil, con una economía que lucha por recuperarse y un mercado laboral que no logra absorber a todos los trabajadores.

La burocracia, la corrupción y la falta de inversión extranjera agravan la situación. Muchos bosnios han emigrado a países de la UE en busca de mejores oportunidades. Sin embargo, hay esfuerzos en marcha para atraer inversión y mejorar el clima de negocios, con la esperanza de crear más empleos locales.

6. Irán

Irán enfrenta una alta tasa de desempleo, que estaba cerca del 11% en el 2023, con una mayor afectación entre los jóvenes y las mujeres. Las sanciones internacionales han tenido un efecto devastador en la economía iraní, restringiendo el acceso a mercados globales y provocando inflación.

El sector privado lucha por crecer en este entorno restrictivo, y muchos jóvenes iraníes con educación no pueden encontrar empleo acorde a sus habilidades. Las reformas económicas y la apertura de mercados son vistas como pasos necesarios para reducir el desempleo, aunque los desafíos políticos y económicos siguen siendo significativos.

Yuniet Blanco Salas

Yuniet Blanco Salas

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